sábado, 13 de junio de 2009

Blanco Perfecto: Los malos también lloran


Curioso el caso de Eric Blakeney, en el que su único largometraje parece haber sido su propia tumba ya que desde el estreno de Blanco Perfecto en el año 2000 no ha vuelto a dar señales de vida. El director neoyorquino sólo tenía en su haber guiones para diferentes series y telefilms, aparte de una nominación a los premios Edgar Allan Poe (casualidades...) por un episodio de Wiseguy, pero fue poner dirección y guión a esta comedia protagonizada por Liam Neeson, y desaparecer del mapa.

Y no es que Blanco Perfecto sea un mal film, ni todo lo contrario, pero sí una comedia ligera muy a la sombra de Una terapia peligrosa (estrenada un año antes), típico films amable que nos muestra la humanidad de personajes metidos en situaciones poco habituales. El problema viene cuando un guionista poco ducho en largometrajes se topa con con una duración que le supera y desequilibra un guión con tópicos, mezclando escenas brillantes con otras tan innecesarias como obvias.

El film nos sitúa en la vida de Charles (Liam Neeson), un agente secreto que acaba de vivir una experiencia traumática que casi le cuesta la vida en una de sus misiones. La ansiedad hará mella en él y no se verá capacitado para seguir ejerciendo su profesión, pero tampoco acumula años de servicio como para retirarse, por lo que acudirá a un terapeuta para apaciguar sus nervios y sus ataques de flatulencia.

En una visita médica conocerá a Judy (Sandra Bullock), que le ayudará con sus miedos y que junto al grupo de terapia equilibrará su vida como agente con una vida normal que le permita bajar la guardia ante la amenaza de un desequilibrado mafioso llamado Fulvio Nesstra (Oliver Platt). Así Charles hará frente a sus fantasmas en dos ámbitos, enrolado en una misión en la que sólo ve su muerte como único final.

El primer y único trabajo de Blakeney tras la cámara no destaca en esa faceta, tan correcta como invisible, y carga su línea de flotación en un guión que sin llegar a destacar sí le vale para aguantar los 102 minutos del film sin que resulte un completo fracaso. En él se parte de los antagonistas unidos por el mismo problema e inmersos en una trama a 3 bandas con varios satélites en ella. Y tan complejo baile es normal que se dé un paso a destiempo o los bailarines no entren siempre en la coreografía.

Mención especial para Sandra Bullock, que produce el film y se reserva un papel tan importante como escueto, consciente de que sus apariciones deben ser las justas y necesarias, relegándose a un segundo plano. El resto del reparto cumple tan desenfadadamente como puede, pero los verdaderos reyes de la función son Neeson y Platt, muy convincentes entre tanto juego de miradas, aunque es Platt el que se lleva las escenas más cómicas.

Al resto no hay que darle muchas vueltas, ya que el film no busca más que un rato entretenido, y sorprende el poco éxito de esta comedia, que ni tuvo promoción y por tanto tampoco beneficios, acumulando poco más de tres millones de dólares, habiendo costado 14. Es de suponer que Blakeley se haya visto afectado por las mismas fobias que su protagonista tras tan sonoro e injusto varapalo.

En definitiva, un film sencillo y escueto, con momentos brillantes e hilarantes que ayudan a sobrellevar otros más tediosos, dulzones y previsibles. Una visión humana hecha comedia sobre la vida de un agente secreto con miedo a la muerte y un mafioso obsesionado con la limpieza y con plantar tomates.

Lo mejor: El personaje de Platt.

Lo peor: Que tras algunas líneas de diálogo brillantes, nos asalten otras tan obvias.

El dato: El número del autobús al que esquivan Judy y Charles es el mismo que lucía el autobús que en su día condujo Bullock en Speed.



8 comentarios:

  1. me gustó mucho cuando la vi. Es diferente y divertida.
    Saludos

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  2. Oliver Platt es un crack! Te recomiendo la serie Huff, sólo por él vale la pena verla.

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  3. Una crítica justa y me rindo a ella. Además, me ha aportado datos interesantísimos, como el malditismo de su director y la pobre recaudación. Casi que le voy a coger más cariño a este patito feo del cine comercial norteamericano, redrum, :).

    Y tienes razón: que aparezca poco la Bullock es un detalle a agradecer ¡siempre!

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  4. Jose, de acuerdo contigo.

    Altatt, qué casualidades, tú! Pero ponte con Lost...

    Jajajajaja! Marguis, yo me reí más con los sonidos de tripa de Neeson ;)

    Insanus, sí que tuvo mala suerte, aunque las votaciones en IMDb y FA tampoco ayudan. Lo de Bullock hasta sabe mal, que mira que sale maja por una vez... Pero sí, hay comedias infinitamente peores pero con más recaudación... sin ir más lejos, la nueva de Kevin Smith!

    ¡1 saludo y gracias por comentar!

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La eternidad ignora a los mudos.