Morgueros, seré directo con este film: es de lo peor que vais a poder ver en vuestra vida. Puede que me esté haciendo tan mayor que hasta agradezca el descanso de 10 minutos en la proyección que me valieron para echar un cigarro y empezar a comentar las tonterías de un film que con más de una hora consumida aún no había comenzado, pero el despropósito de lo nuevo de Michael Bay es tan grande como su presupuesto.
Obviamente en un film de este calibre económico los efectos especiales brillan sobre el resto, aunque me sorprendió gratamente lo reales que parecían por momentos los robots completamente integrados en el escenario. Ahora bien, espectacular no implica emocionante, y rodar escenas de acción con protagonistas de semejante tamaño y sin talento para ello lleva a que muchas de ellas resulten tan aburridas como confusas.
Lo que me parece sorprendente es el bajo nivel del resto del film, en casi todos sus apartados, rozando en muchos casos lo bochornoso. Bay parece haberse asentado en su espíritu quinceañero, como si se acabara de divorciar y se gustara en su apuesta de culo, tetas y chiste facilón, explotando no sólo el físico de Megan Fox a base de primeros planos, sino metiendo al personaje de Isabel Lucas con el único propósito de calentar a protagonista y personal.
La trama sigue siendo tan absurda como la anterior, no cabe duda, pero el desarrollo es incluso peor y las situaciones acaban siendo tan rocambolescas para un film de dos horas y media que acaba por parecer todo una gran broma en la que me podría haber esperado ver aparecer a Marty McFly con su Delorean, o al mismísimo Locke con un jabalí a cuestas. Y es que le sobra tanto humor a este film...
Por si fuera poco, el apartado técnico remata el esperpento con una serie de bochornosos errores impropios de un film que llega a las salas comerciales. El sonido es tan malo que me hizo replantearme si era culpa del doblaje o de la sala, ya que bichardos que pesan toneladas se pasean haciendo el mismo ruido que un gatico, y las armas de los marines producen el mismo ruido que las escopetas de feria, incluso tienen su puntería.
Pero la palma se la lleva el montaje, que junto al guión ayuda a que muchas escenas no tengan el más mínimo sentido, mientras que otras directamente están mal montadas, acabando bruscamente y siendo completamente inconexas con las que le suceden. Este apartado es el que acaba matando el film, resultando mediocre el resultado en una cinta que sólo parece haber cuidado los efectos digitales y el maquillaje de la protagonista.
En definitiva, no hace falta hablar más de un espectáculo tan lamentable como Transformers 2: La venganza de los caídos, un film infinitamente peor de lo que cabía esperar de manos de alguien que filmó La Roca. Largo, absurdo, aburrido y puntualmente espectacular.
Obviamente en un film de este calibre económico los efectos especiales brillan sobre el resto, aunque me sorprendió gratamente lo reales que parecían por momentos los robots completamente integrados en el escenario. Ahora bien, espectacular no implica emocionante, y rodar escenas de acción con protagonistas de semejante tamaño y sin talento para ello lleva a que muchas de ellas resulten tan aburridas como confusas.
Lo que me parece sorprendente es el bajo nivel del resto del film, en casi todos sus apartados, rozando en muchos casos lo bochornoso. Bay parece haberse asentado en su espíritu quinceañero, como si se acabara de divorciar y se gustara en su apuesta de culo, tetas y chiste facilón, explotando no sólo el físico de Megan Fox a base de primeros planos, sino metiendo al personaje de Isabel Lucas con el único propósito de calentar a protagonista y personal.
La trama sigue siendo tan absurda como la anterior, no cabe duda, pero el desarrollo es incluso peor y las situaciones acaban siendo tan rocambolescas para un film de dos horas y media que acaba por parecer todo una gran broma en la que me podría haber esperado ver aparecer a Marty McFly con su Delorean, o al mismísimo Locke con un jabalí a cuestas. Y es que le sobra tanto humor a este film...
Por si fuera poco, el apartado técnico remata el esperpento con una serie de bochornosos errores impropios de un film que llega a las salas comerciales. El sonido es tan malo que me hizo replantearme si era culpa del doblaje o de la sala, ya que bichardos que pesan toneladas se pasean haciendo el mismo ruido que un gatico, y las armas de los marines producen el mismo ruido que las escopetas de feria, incluso tienen su puntería.
Pero la palma se la lleva el montaje, que junto al guión ayuda a que muchas escenas no tengan el más mínimo sentido, mientras que otras directamente están mal montadas, acabando bruscamente y siendo completamente inconexas con las que le suceden. Este apartado es el que acaba matando el film, resultando mediocre el resultado en una cinta que sólo parece haber cuidado los efectos digitales y el maquillaje de la protagonista.
En definitiva, no hace falta hablar más de un espectáculo tan lamentable como Transformers 2: La venganza de los caídos, un film infinitamente peor de lo que cabía esperar de manos de alguien que filmó La Roca. Largo, absurdo, aburrido y puntualmente espectacular.
10 comentarios:
Coincido con tus ideas, es la peor película que vi en mucho tiempo.
¡Pero reivindico el espíritu quinceañero! No siempre es sinónimo de películas malas o bochornosas como ésta de Michael Bay. Pienso en un ejemplo: True Lies (James Cameron, 1994) es una película ciento por ciento de espíritu quinceañero (el propio Cameron lo decía en una entrevista: "quise hacer una película que me gustaría ver si tuviera quince años") y sin embargo desborda de buenas ideas.
No es el espíritu adolescente, no tiene que ver con la inmadurez o la falta de experiencia. ¡Es malísima porque no tiene emoción ni creatividad ni nada!
Amen
Jajajaja! Hernán, el quinceañero plan Goonies me parece genial, o el de True Lies, pero este impostado de recién divorciado que le entra a las jovencitas en las discotecas, como que no...
Jajajaja! Aparte, en muchos momentos está mal hecha, punto.
Amen too, Ángel.
¡1 saludo y gracias por comentar!
Sinceramente... peor fue Terminator 3... aunque no llegué a ver el final de ninguna de las dos... sentía que desperdiciaba minutos de mi vida...
Estoy con Silvia para mi fue mucho peor Terminator 3, vi mucho mas dialogo en una porno, y mucho menos historia que esta.
Cierto es que le sobra mucho humor, espeabamos algun gag de alguna máquina estilo Chiquito de la Calzá, pero bueno, más allá de eso a mi me entretuvo, en peores batallas hemos estado.
La prota ha dicho que no sale con un tío si antes no se tatúa algo referente a ella(el nombre, la cara...). Vaya petarda.
Por supuesto, frente al espejo se encuentra fea (también lo ha dicho).
Y para terminar, comentó que desde el fulgurante despegue de su carrera artística dice cosas que no están en conexión con lo que piensa; es decir, que ella piensa unas cosas pero luego, sin saber por qué, larga otras que no tienen que ver con lo que estaba pensando. Porque ya dieron el Príncipe de Asturias de este año que si no...
Petarda, petarda.
Michael, vueeeelveeee...¡¡¡¡
Uf... no se yo, Silvia... yo he visto ambas recientemente y me resulto más absurda Transformers 2...
Lolo, si tú no has visto Terminator 3!!! Como siempre, opinando sin tener ni idea...
JAJAJAJAJAJA! Javotxu, totalmente de acuerdo, petarda a rematar, pero parece que los calentones consiguen el perdón. Ahora bien, teniendo en cuenta el % de taquilla que se le debe sólo a ella, me da que va a tener trabajo la chica durante largo tiempo...
¡1 saludo y gracias por comentar!
redrum, que falta de respeto llamarme Lolo!
Ha sido un error material, poner un 3 por un 4!!
Jajajaja! ¿Falta de respeto? Ai madre, que se te va la olla...
Pues al loro! Que si ese fallo lo tienen en la nómina seguro que protestas! Aparte, si no paraste de echar pestes sobre las frases de Turturro...
¡1 saludo y gracias por comentar!
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